18 de mayo de 2014
Libre de ataduras, deshaciéndose paso a paso de cadenas ya sin peso.
Despojándose de lo inservible y desposeyendo aquello que nunca debió tener dueño.
Dejando, por fin, inerme a aquel adversario que no halló otro remedio que huir,
cobarde como fue desde un comienzo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario